Devocional # 79 24-Diciembre-2013
Yo,
la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en
tinieblas. Juan 12:46
Volvamos a la esencia de
la navidad; La Natividad de Jesús
Este
mundo es muy sombrío y lleno de maldad: Jesús ha venido para que por medio de
la fe tengamos luz y no permanezcamos en medio de las tinieblas que envuelven a
toda la humanidad.
«Todo aquel» es un término muy amplio que abarca
al mundo entero: tú y yo. Si seguimos a Jesús, jamás permaneceremos en la
sombra de la muerte, sino que entraremos en la luz vivificadora de un día que
no tendrá fin.
¿Por qué no procuramos salir ahora mismo a la
luz? Tal vez cae sobre nosotros alguna nube negra, pero si creemos en Jesús no
quedamos en tinieblas.
Él ha venido para darnos la luz del mediodía.
¿Será en vano su venida? Si tenemos fe, la luz del sol será un privilegio para
nosotros; disfrutemos de su esplendor.
Jesús ha venido para librarnos de la noche de la
ignorancia, de la duda, de la desesperación, del pecado del temor; y todos los
creyentes han de saber que así como el sol se levanta y derrama luz y calor,
así la venida de Jesús tampoco será en vano.
Querido hermano, aparta de ti todo desaliento.
No vivas en la oscuridad, sino en la luz. En Jesús está tu esperanza, tu gozo,
tu cielo. Mírale sólo a Él y te regocijarás, como las aves cuando sale el sol,
y como los ángeles delante del trono de Dios, cuando exclamaron.
Lucas 2:14 “Gloria a Dios en lo más alto del cielo y
en la tierra paz a los hombres: ésta es la hora de su gracia.” (Biblia Latinoamericana)
Bendiciones
Pbro. Gilberto Flores Elizondo
Pastor de la Iglesia: Camino Verdad y Vida
Iglesia Nacional Presbiteriana
Tel: (81) 8352 6165
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